Las letras como siempre vienen con una clara historia y sus melodías definidas. Al ser tantos en la banda ¿Cómo es el tema de la composición?
Hasta ahora en la historia de Pampa, exceptuando tres que son las que hizo Lucho, todas salieron de quien te está hablando. Tienen que ver con estados de ánimo determinados. Hay discos como Único y Sentido que es un poco más introspectivo y este es más arriba, tiene un espíritu alegre/contagioso. También tiene momentos donde evidentemente uno escribe sobre cosas que le han pasado, vivido y miradas que tiene respecto de la realidad. Mediotización ponele es una canción que habla de una cuestión tan picante como los medios y como se usan o de qué manera intervienen en nuestra vida. Hay otras que hablan más de lo personal como Confiar en mí, que en realidad es confiar en el sentido de no darle tanto lugar a la cabeza y más al corazón. Cuando dice Confiar en mí más en ustedes son los pensamientos y no gente. No debemos darle tanta importancia a lo que la cabeza nos está vendiendo todo el tiempo, uno se abutoboicotea. Si corres de lado y ves que son esas voces que uno tiene adentro por lo general salen mejor las cosas. Tratamos de hablar de cosas que nos lleguen a nosotros como miembros de la banda, desde lo musical y lo que se cuenta.
Nombrabas Mediotización ¿Por qué lo eligieron como uno de los cortes del disco?
Estaba bueno el mensaje, era una letra políticamente incorrecta que iba a tener su correlato en como la agarraban e interpretaban los medios. No está hablando específicamente de nadie, elípticamente sí de una parte de los medios. Por ejemplo hoy me caí de culo cuando una piba me dijo que lo estaban pasando en TN. Ah bueno, no entendieron nada del mensaje, dije. Es una canción distinta de Pampa, no es una temática que hayamos tocado antes, tampoco la música, sale un poco de nosotros. Arlequines es otro que no parece nuestro, por lo crudo, la temática y como está interpretado. Es algo muy personal en ese caso. Salió un tema oscuro pero con mucha fuerza.
¿Eso habla un poco de lo que querían proponían con Singularmente, que cada tema sea único por sí solo?
Claro, cada tema es singular dentro de lo complejo de un disco. Muchos hablan de lo que la cabeza te vende continuamente, lo que no vas a poder lograr si te basas en eso. Muchas cosas psicológicas había en mi cabeza porque este disco me tocó justo cuando hace un año y medio que hago terapia, quiérase o no estaba involucrada en la creación de las letras. Y el concepto del arte que elegimos con Guillermo Bosch, tratábamos de encontrar una referencia que sea como un leimotiv para el disco. Nos pareció que tener al pibe emergiendo de esa masa que no tiene cara dentro de las bolsas de papel, como que el quería ser singular dentro de esa masividad.
¿Tiene que ver también con ustedes como banda?
Sí, siempre intentamos demostrar nuestra singularidad dentro de todo lo que está sonando. Apelamos a hacer de nuestro estilo la diversidad. A veces alguno te puede decir que conspira contra un crecimiento exponencial. Por otro lado, te podría decir que para mí no existe ver la música de una sola manera, nos parece lo más sano divertirnos, crear y meternos con distintas cosas antes que embaucarnos a nosotros mismos y hacer sólo un género. Intentamos hacer todos los mejor posibles, no son cien por ciento ortodoxos, es nuestra visión de cada estilo o como lo queremos interpretar con nuestra musicalidad, cosas buenas y limitaciones. Tratamos de hacer algo representativo a lo que es la banda. En este disco hicimos el folclore Paisano de adoquín, que es el tipo del interior viviendo en un departamento. Te hago un folclore pero también aprovecho para hacerme cargo de lo que soy.
¿Cómo fue volver a grabar en un estudio luego de Único y Sentido (2007)?
Fue una experiencia alucinante. Los cuatro años que pasaron, si bien en el medio estuvo el CD/DVD en vivo que también nos llevo un tiempo de laburo, edición, audio; dieron como fin este disco que terminó siendo un proyecto gigante. Era una necesidad interna de la banda por renovarse, cambiar los shows, que la gente tenga nuevas canciones de las cuales apropiarse. En el 2010 decidimos ponernos de lleno a componer, nos fuimos de gira en el verano pasamos por el sur y coincidimos con De Bueyes que estaba allá de gira con quienes compartimos escenario. Ahí estuvimos con Pepe y Oski, le contamos como era el asunto, si les interesaba sumarse como productores. Dijeron que sí y de la mano de ellos fuimos seleccionando las canciones, cuales podían andar y cuales no. Así llegamos a las canciones con las que laburamos y después el tamiz de las que quedaron las 11 del disco. Entre octubre y noviembre hicimos la preproducción con ellos y en diciembre nos metimos en Del Cielito a grabarlo.
El disco se nota mucho más ajustado y perfeccionista a nivel sonido ¿Tiene que ver con la producción de Oski y Pepe o también con su crecimiento musical?
Está todo sumado, acá me parece que las cuestiones pasan por varias aristas, en 4 años tratamos de mejorar cada uno de su lugar, seguramente fue potenciado el laburo a la hora de producir tenerlos a ellos escuchando los temas y dando sus aportes. Después tener el disco grabado íntegramente en un estudio como Del Cielito que es increíble aparte del entorno que son condiciones fabulosas. Estaba todo servido como para hacer un disco bien cojudo. Grabarlo íntegramente ahí nos dio la posibilidad de ir viendo cosas sobre la marcha, se hizo a conciencia pero mucho más relajado. Daba placer ir a grabar.
¿Cómo fue la primera escuchada ya cono el disco terminado?
Con el disco mezclado en el estudio le pegamos una oída todos juntos, nos quedamos súper chochos. Escuchamos tema por tema para armar el tracklist, algo que no es fácil porque el orden de cada canción tiene un sentido. Mejor aún fue cuando vino masterizado de Estados Unidos, fue genial como creció de sonido. Nos quedamos re contentos porque fue un laburo profesional como si fuéramos una banda de primera línea, es a lo que a uno aspira, no por estar en la grilla de las grandes bandas sino por trabajar cada día de una manera más profesional. Lo que empezó siendo un proyecto de grabar solo en Del Cielito la bata y bajos, terminamos haciéndolo todo ahí, el presupuesto se fue a los caños. Es el mejor disco de Pampa lejos, por la inversión, ejecución, productores y todos los que intervinieron para que así sea.
En Hoy es ahora dicen Que el deseo no se eche a perder ¿Cuál es ese deseo de Pampa en este momento?
El deseo es instalarnos en un lugar de lo que es la escena local de bandas, tener cada ver más laburo para dedicarnos de lleno a esto. Poder salir de gira por el interior sin tener que pensar tanto en como hacerlo, como conseguir un productor que nos lleve a tal lado sino que la banda por el peso de los temas, trayectoria y lo que transmite este disco nos abra puertas para poder decir que estamos en camino a ser profesionales, que esta sea nuestra profesión. En la banda esto es un laburo más para cada uno, algunos involucrados en la música como productores, profesores o en cosas distintas. El horario de ensayo es a partir de las 5, 3 o 4 veces por semana hasta las 10. Es un laburo más aparte de lo que cada uno hace.
¿Cuánto los ayuda tener su sala de ensayo propia?
Hace muchos años que tenemos nuestra sala pasa que ahora nos mudamos a otro lugar y estamos un poco más cómodos. Es un placer porque disfrutas de tener un lugar para comer todos juntos como para ensayar, recibir gente, es como tu casa pero es de la banda. No estás condicionado en cuanto a horarios para ensayar.
¿Cómo es volver a un teatro grande como es el de Colegiales luego de haber grabado el Naturaleza Revivir en el de Flores?
Lo conocemos muy bien, hemos tocado varias veces ahí, sabemos lo que suena. La idea era presentar el disco en condiciones dignas, estar tranquilos por el lugar en cuanto a lo que la gente va a recibir. Para la capacidad nuestra es perfecto, tenemos la seguridad y certeza de un buen sonido y sabemos que podemos armar un escenario con una buena puesta en escena. No va a ser una sorpresa para nosotros estar ahí sino que será una cuestión de disfrutarlo, no estar pendiente de los detalles. Sabemos mas o menos que pasará al subir al escenario. Si el lugar está lleno nos pondremos contentos si no lo está tanto sacaremos fuerzas de lo que queremos contar y transmitir.
¿Qué se puede adelantar del show?
Básicamente vamos a tocar todo el disco por primera vez con lo cual es la excusa para que mucha gente se acerque y después haremos un repaso de los discos anteriores. Será un show de mas o menos 26,27 temas dependiendo de cómo estemos con el tiempo. La idea es plantear un show donde esté reflejado lo que queremos contarle a la gente independientemente del disco. Va a haber que será la primera vez que escucha a la banda en vivo que se acercó por el disco nuevo entonces vamos a contarles de que se trata esto. Tenemos 15 temas de los discos anteriores para mostrarles un poco lo que es Pampa.
Después de esta presentación ¿Habrá gira por el interior del país?
Tenemos un par de cosas dando vueltas que tienen que ver con volver a esos lugares que uno pisa cada vez que saca un disco nuevo porque durante el año se complica. Es lo que te decía antes, nos encantaría vivir de esto y estar todo el tiempo tocando, girando, todo lo que ataña esta profesión. Mientras tanto, cuando tenes un material nuevo la gente te recibe. Iremos por el interior, seguramente repetiremos en lugares del gran Buenos Aires. Es cuestión de afianzar público, cuando sacas un disco cada dos años hay que renovar votos. También queremos volver a Rosario, Cordoba, ver si pisamos Santa Fe después donde mucha gente pide que consigamos la forma de llegar.
Por Agustín Munaretto
Imagenes: Prensa Pampa Yakuza y Facebook oficial de la banda
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